Riga

Con motivo de una jornada que los de mi organización tuvieron en una iglesia amiga
en Riga pude viajar y visitar la ciudad.
Tenía muchas ganas de visitar la capital y no me defraudó. Fueron 3 horas de nuevo de
viaje, totalmente incomprensible para el número de kilometros que hay.Pero al ir con
wifi gratis se pasa más rápido.
De Riga me sorprendio el hecho de que es muy distinto del resto del país. Una ciudad
mas bulliciosa con mucha gente por todas partes, tiendas y monumentos que ver.
El centro antiguo muy interesante con edificios clásicos en buen estado.
Vi el monumento a la independencia custodiado siempre por dos guardias.
Tras un almuerzo rápido en la estación por sólo 2 euros en un buffet seguí visitando
con mi mentora El mercado,los parques y el casco antiguo.
Curioso que En los servicios de la estación hay que pagar por entrar.
Tambien compre lo que pensaba que era leche, resulto ser kéfir, especie de yogur
búlgaro y agua con gas.